No lo suficientemente conocida entre las culturas de la América Precolombina, no obstante su gran belleza, esta cerámica se desarrolló en la actual provincia panameña de Coclé, en las cercanías del río Santa Marta.
La influencia cerámica de la cultura Coclé se extendió prácticamente por todo el Istmo de Panamá, a través de la decoración en volutas y sus característicos colores.
Eran también excelentes orfebres; sus piezas de oro llegaron hasta Chichén Itzá y otros lugares de Mesoamérica y Sudamérica.; hasta que. entre 1515 y 1520, los españoles lucharon con los jefes del centro de Panamá por el oro, desarticulando las bases sociales y políticas de esta cultura.
En sus diseños muy a menudo las formas de animales , como pájaros, serpientes , langostas, tiburones y otros, se recombinan en una sola figura; de modo tal que en una sola imagen podemos ver serpientes bicéfalas (de dos cabezas) con patas de algún otro animal; o pájaros con escamas de cocodrilos, y con mandíbulas también de cocodrilo en vez de sus picos
Un cangrejo bellamente estilizado; se pueden observar los dos ojos, las pinzas y las patas . Los puntos marcados en el triángulo inferior evocan las rugosidades de su caparazón |
Un muy interesante diseño Coclé: Del cuerpo de la gran figura central ¿cocodrilo? (de frente) emanan hacia el extremo inferior dos figuras de tipo draconiforme vistas de costado |
Se trata de diseños donde a menudo las formas rectilíneas son substituidas por lineas curvas y sinuosas; la voluta es aquí el elemento compositivo predominante y ha sido inteligentemente adaptada para llenar áreas de diferentes tamaños y formas; esto crea una imagen visual de gran armonía y liviandad. Es un arte elegante en su simpleza y en su sentido decorativo de gran refinamiento ; los colores utilizados eran el blanco, rojo, negro y tonos intermedios; se trabajaba la pintura mediante la técnica del engobe que consistía en pintar la pieza en crudo (antes de su cocción) con arcillas diluídas mezcladas con pigmentos vegetales, minerales y animales, procediéndose, una vez seca la obra a su cocción
Un plato de cerámica que muestra la extraordinaria habilidad decorativa de los artesanos cocle: La partición del espacio es de gran armonía sin por ello caer en lo estático El trazo espiralado que parte del cuerpo de los dos animales ¿aves? ubicados respectivamente en la parte superior e inferior del plato va a finalizar en las dos cabezas; una a la derecha y la otra a la izquierda de la parte media del plato creando una composición sumamente equilibrada pero a la vez dinámica Los trazos rojos subrayan la partición en cuatro del espacio, así como la dinámica de las dos grandes lineas sinuosas |
En este plato Coclé dos cabezas de cocodrilo aparecen unidas a un cuerpo de serpiente |
Las imagenes de la cerámica Coclé parecen, a menudo contornearse en una alegre danza
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