martes, 13 de noviembre de 2012

EL DILUVIO EN LA AMERICA PRECOLOMBINA






Las leyendas antiguas acerca de un diluvio universal son tan numerosas en todos los continentes que, podemos decir que más allá de lo mítico, un  diluvio sucedió como  hecho histórico.
Resulta interesante recordar algunas de estas antiguas tradiciones.  ya sea precolombinas , hindúes, mesopotámicas o egipcias; y es esto lo que trataremos de hacer a lo largo de este y  los próximos post.

PARTE PRIMERA:
EL DILUVIO EN LA AMERICA PRECOLOMBINA

En la América precolombina  los Cañaris, antiguos pobladores de las provincias de Azuay y de Cañar en el territorio del Ecuador, consideraban el diluvio como el origen de su raza  Ellos decían que en tiempos muy antiguos  habían perecido  ahogados todos los seres humanos  en una espantosa inundación que cubrió toda la tierra;  logrando salvarse solamente dos hermanos varones en la cumbre del  monte  Huacayñan o camino de llanto.( Conforme crecía la inundación, se levantaba también sobre las aguas este cerro de modo que a los hermanos nunca los cubrian las aguas) Luego fueron alimentados por dos guacamayas , con quienes uno de ellos se unió  y dieron lugar a una nueva raza de hombres;  las mismas aves guacamayas fueron quienes dieron las semillas a los hermanos, para que siembraran  y cultivaran la tierra.

Tambien la tradición del Diluvio se encuentra entre muchos de los pueblos precolombinos de Chile: los Araucanos, por ejemplo,  relatan el enfrentamiento entre dos serpientes: Threng Threng, la serpiente de las Montañas y Kai Kai, la serpiente de las Aguas . De acuerdo a sus  tradiciones  la serpiente Tren-Tren, muestra  una naturaleza benevolente y sabia, al advertir, guiar y amparar a los hombres; la otra serpiente, al contrario, busca su destrucción por medio de la crecida de las aguas. La tradición del combate entre estas serpientes narra que  ciertos montes a los cuales llaman Thegtheg, , crecían excediendo siempre a las aguas gracias al poder de la serpiente de las montañas , mientras que la otra serpiente hacía subir las aguas del mar en su intento de destruir a la humanidad ; no obstante algunos hombres pudieron salvarse y a partir de ellos se había multiplicado nuevamente el linaje humano
El mito relata que durante  esta contienda muchos mapuches fueron  alcanzados por las aguas del mar y Kai-Kai los transformó en peces, mientras que otros, antes de ser atrapados por las aguas, prefirieron ser convertidos en peñascos por   Tren-Tren
En medio del gran  bullir de olas y montañas que crecen -dice la narración- hombres, mujeres y niños con sus enseres y con los animales salvados, se mantienen aferrados en las cumbres tratando de no resbalar y contemplando despavoridos la lucha titánica que se desarrolla a sus pies, hasta que llega un momento en que la altura de los cerros se aproxima al sol. Kai-kai hace un último esfuerzo, pero es incapaz de alcanzar esa altura y se conforma con mantener el nivel de las aguas, dejando a los cerros convertidos en islas cuya altura estribaba en tres recuestos en formas de pirámides. Mientras tanto los mapuches eran abrasados por los rayos del sol y por más que atinaban a cubrirse la cabeza con platos de madera muchos sucumbieron de insolación, otros, los menos, sobrevivieron y algunos perdieron el cabello de donde, según los mapuches, provienen los calvos.
A estos escasos sobrevivientes los mapuches les den el nombre de lituches u hombres de los comienzos; y cuentan que  para que Kai-kai hiciera bajar el nivel de las aguas, Tren-Tren aconsejó a los sobrevivientes sacrificar a un niño Satisfecha kai-kai por dicho  sacrificio hizo que las aguas comenzaran a descender e igual determinación tomó Tren-Tren con los cerros.
 Una vez finalizada la batalla entre los dos poderes , los hombres que habían sido transformado en peces salen del mar y se casan con las doncellas que iban a pescar; de ahí proceden los linajes de los mapuches que llevan el nombre de peces, como, asimismo, los linajes que proceden de los hombres convertidos en peñas llevan el nombre de cura, piedra, como sufijo.
 Los mapuches tienen en muy alta valía estos linajes .
 Los hombres que fueron convertidos en animales marinos o rocas, tras el diluvio, no pudieron recuperar su forma humana, pero siguieron cohabitando con las mujeres que se habían salvado en las cumbres y que mariscaban y pescaban

De acuerdo a las leyendas mapuches, kai-kai mantiene enormes masas de aguas congelada en las entrañas de la tierra y  las saca cuando desea provocar inundaciones. Afirman también que tren-tren avisa a los mapuches el comienzo de la inundación por medio de un grito estridente.
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Entre los Incas del Perú se narraba que el  dios Viracocha, responsable de la creación de los humanos, harto de su corrupción, decidió exterminar a aquellos que no merecían seguir viviendo. Al resto los transformó en animales o los salvó del diluvio llamado “Uno Pachacuti”(diluvio Universal).
Viracocha creó una raza de gigantes, pero luego se arrepintió y decidió hacer hombres a su imagen y semejanza, instruyéndolos en la agricultura y las ciencias Sin embargo muchos  de estos hombres cayeron  en tentaciones y vicios, violando los mandamientos de Viracocha; por lo que el dios los maldijo y dispersó, convirtiendo a algunos en piedras, a otros en animales y al resto les envió el “Uno Pachacuti” (diluvio universal), donde murieron todos.
Un mes antes del diluvio, los animales presintieron la catástrofe, por lo que las llamas y las vicuñas perdieron el apetito y se juntaban a la caída del sol mirando fijamente el cielo.
El pastor que las cuidaba, intrigado por esta actitud, las interrogó y fue así que le contaron que dos estrellas se acercarían hasta tocarse y en ese momento, el mundo quedaría sumergido bajo las aguas.
El pastor, muy impresionado por la noticia, no perdió el tiempo y reunió a su familia, juntó abundantes alimentos y reuniendo su rebaño buscó refugio en la cumbre de la montaña Ancasmara.
Sesenta días más tarde, cuando cesaron las lluvias, descendió con sus familiares. Estos seres salvados del diluvio, fueron los antepasados de los Incas
Al respecto dice Pedro Sarmiento de Gamboa en su "Historia de los Incas":
"...y sobre todo les envio un diluvio general, al cual ellos llaman uno pachacuti, que quiere decir agua que trastorno la tierra. Y dicen que llovio sesenta dias y sesenta noches, y que se ancgo todo lo criado, y que solo quedaron algunas senales de los que se convirtieron en piedras para memoria del hecho y para cjemplo a los venideros en los edificios de Pucara, que es sesenta leguas del Cuzco...".
(En Perú, son muchas los mitos referentes a un indio a quien una llama advirtió de que iba a producirse un diluvio, salvándose gracias a aquella advertencia.)

En el lago Titicaca, donde habita un grupo de indígenas conocidos por el nombre de uros o urus, existe una leyenda local que dice que, después del diluvio universal, fue en el lago Titicaca donde se vieron los primeros rayos del Sol.



En Colombia los indios chibchas mantienen viva la leyenda de Chía, la Diosa Lunar que utilizó sus medios mágicos para provocar un diluvio en el que pereció la mayoría de la población
Chía es una diosa de la mitología muisca. , Chiminigagua, la creó para iluminar las noches con la luna, una vez que Xue (el dios solar) se hubiera  ocultado.

 Para los Aztecas hubo dos diluvios que purificaron a la humanidad. Las leyendas Aztecas hablan de cuatro edades (en la primera de las cuales vivieron los gigantes,)
 En uno de los diluvios “Las aguas de arriba se juntaron con las aguas de abajo, borran los horizontes y hacen de todo un océano cósmico sin tiempo”.
El segundo diluvio se produce en la cuarta época, mientras gobernaba la diosa del agua “Chalchiuhtlicue; (La de la falda de piedras preciosas») diosa de los lagos y corrientes de agua. También  patrona de los nacimientos: “La destrucción se produjo en forma de lluvias torrenciales e inundaciones. Las montañas desaparecieron y los hombres se transformaron en peces”.
En el mito de los cinco soles, ella alumbró al mundo en el Primer Sol, dominaba el cuarto mundo, en la era Cuatro-Agua. Durante su reinado el cielo era de agua, la cual cayó sobre la tierra como un gran diluvio a manos de esta diosa.


File:Chalchiuhtlicue copy.jpg



Los Mayas de México y de América Central tienen también su leyenda diluviana llamada Haiyococab (“agua sobre la tierra”). Según la s crónicas del obispo católico De Las Casas, los indios le llaman Butic que significa “diluvio de muchas aguas” pero también hace referencia a un juicio. También creen que vendrá otro diluvio-juicio, pero esta vez de fuego.
  La tradición maya habla de dos cataclismos: ese  gran diluvio de agua llamado Haiyococab que purificó en el pasado a la humanidad y un diluvio de llamas de fuego que volverá a hacer lo mismo en el futuro.
 Los datos sobre el fin del mundo según los mayas, proceden del Codice de Dresde,

Por el cielo se tiende una figura semejante a una serpiente  La vía láctea (casi siempre representada como una serpiente bicéfala); en su flanco hay símbolos de las constelaciones y de su vientre cuelgan signos de eclipses de sol y de luna. De sus fauces abiertas y de los dos signos de eclipse, un caudal de agua se vierte hacia la tierra. Bajo la serpiente del cielo, la Diosa Vieja de largas uñas como garras, en los dedos de las manos y los pies, patrona de la muerte y la destrucción, sostiene un cántaro invertido del que sale un torrente destructor. En la parte inferior, el pájaro Muan de siniestro augurio está posado en la cabeza de la deidad negra de la guerra y de la muerte. Ésta tiene en la mano derecha dos jabalinas y en la izquierda una vara larga, todas apuntando hacia abajo.


 Los mayas modernos del norte de Yucatán creen que hubo tres mundos antes de éste. El primero estaría habitado por enanos, quienes hicieron las grandes ciudades en piedra antes de la creación del sol; al irrumpir el astro solar también se convirtieron en piedras. El segundo mundo estuvo poblado por seres humanos llamados los transgresores, mientras que el tercer mundo estuvo poblado por los propios mayas y se destruyó  por inmersión (hunyecil o bulkabal). El cuarto mundo es el actual y también acabará según esta mitología maya, por agua.

Por su parte los lacandones (mayas salvajes) de la cuenca del Usumacinta, temen cataclismos, temblores de tierra que pondrían fin a nuestro universo, en tanto que la humanidad será exterminada por jaguares.en medio de una terrible inundación
Ese mito está muy cerca al que en general se relata en el centro de Mexico: el fin del mundo por temblores de tierra y por la irrupción de los Tzitzimines, los monstruos esqueléticos de oeste, que devorarán a los humanos.

En Norteamérica también existen leyendas similares, “entre los inuit de Alaska, existía también una tradición sobre un terrible diluvio que, acompañado de un terremoto, se extendió por toda la tierra.“

Los luisenos de baja California cuentan una leyenda sobre un diluvio que inundó todas las montañas y destruyó a la mayor parte de la humanidad.
También ente los indios Dakotas se afirmaba “el mar y las aguas habían anegado en una época la tierra, de forma que toda vida humana quedo destruida“.
 Por su parte, los chickasaws aseguraban que el mundo había sido destruido por el agua “pero una familia se salvó junto con una pareja de cada especie animal”. 

La tradición del pueblo de Isla de Pascua dice que sus ancestros llegaron a la isla escapando de la inundación de un mítico continente o isla llamada Hiva. Según su tradición  los antiguos maori (sabios) habían pronosticado que vendría un tiempo en que se hundiría Hiva. Este hundimiento de la tierra, se dice que lo había predicho Moe Hiva, un sabio y profeta (Kohou Tohu),. El hundimiento de hiva y el viaje de los antiguos Rapa Nui buscando una nueva isla, siguiendo la ruta de las estrellas, rd parte de la tradición oral de ese pueblo

(Continuará)


http://www.alertaaustral.cl/2008/12/tradiciondeldiluvio.html
“Mitos y Leyendas de Chile a la luz de la Cosmogonía Glacial. El Diluvio y los Gigantes”, de Rafael Videla Eissmann. Ediciones Tierra Polar. 2008)
http://www.formarse.com.ar/enigmas/diluvio.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Diluvio_universal 
 


1 comentario:

  1. Es asombrosa la coincidencia. No me creo que solo sean mitos.

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